El día que recibí mi Maleta Roja, me sentí como una niña abriendo sus regalos la mañana de Reyes.
Saboreé los aceites y cremas de masaje de sabores (melón-mango, fresas-champagne, menta... mmmm), me deleité con la pintura corporal de chocolate y los polvos de miel, disfruté con el aroma de las velas de masaje, probé las texturas de los lubricantes, disfruté la suavidad de mi piel tras aplicarme la loción Karicias y la increible sensación del Volaré...
Me lié a desempaquetar vibradores, masajeadores, anillas... puse pilas, hice vibrar cada aparatito, quité pilas...
Me enamoré de algunas piezas de lencería como el tanga con perlitas y otras piezas de joyería erótica y decoración corporal, jugué con las esposas de felpa y los plumeros de colores...
Fue una absoluta explosión de todos mis sentidos. Y decidí cuáles iban a ser mis próximos y verdaderos regalos de Reyes estas Navidades.
Ahora estoy deseando poder llevar mis regalos a mi próxima reunión...
¿Qué elegirás tú?
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